Y entonces te das cuenta que cuando cierras los ojos ves todo más claro y más brillante, porque la
luz que ilumina tus pensamientos, tus sentimientos y tus emociones, eres TÚ y tu perfecta esencia luminosa.
La claridad que te ofrece el elegir reconocer quien eres, está disponible para ti en este momento. No te detengas, sigue caminando y disfruta de las vistas. Abraza a tus miedos y ábrete a su enseñanza.
Solo cierra los ojos y abre el alma para vivir cada segundo como la mejor experiencia de tu vida.
Con mucho cariño, Ana Cristina